EEUU estudia dividir Google para combatir su monopolio
Las autoridades estadounidenses están evaluando la posibilidad de que Google se vea obligada a vender el sistema operativo Android y el navegador Chrome, en un intento por frenar su dominio monopólico en el sector tecnológico.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos estaría considerando la posibilidad de exigir a Google que se divida, como una de las medidas tras el reciente fallo de un tribunal federal que determinó que la empresa violó las leyes antimonopolio al controlar cerca del 90% del mercado de búsquedas en Internet.
En caso de que las autoridades opten por avanzar con el desmantelamiento, las divisiones más propensas a verse afectadas serían Android, el sistema operativo móvil de Google, y el navegador web Chrome. También se evalúa la venta de AdWords, la plataforma de publicidad de texto.
La exigencia de dividir Google sería el primer intento del gobierno de desmantelar una empresa por monopolio desde el fallido intento con Microsoft hace dos décadas. De concretarse, sería la mayor división forzada de una compañía en Estados Unidos desde el caso de AT&T en los años 80.
Sin embargo, personas cercanas al asunto han señalado que es probable que el gobierno prefiera optar por una prohibición de los contratos exclusivos, que fueron clave en su caso contra Google.
Alternativas menos radicales incluirían obligar a Google a compartir más datos con sus competidores y otras medidas que eviten que obtenga una ventaja injusta en el desarrollo de productos de inteligencia artificial.
La semana pasada, DuckDuckGo, un motor de búsqueda alternativo, expresó que Google ha usado su poder monopolístico para bloquear la competencia en el mercado de búsquedas al mantener el control sobre los principales canales de distribución durante más de una década.
DuckDuckGo aplaudió el fallo y el trabajo del Departamento de Justicia y los fiscales generales para hacer cumplir las leyes antimonopolio, aunque reconoció que “el camino por delante será largo”.
Por su parte, Google ha anunciado su intención de apelar la decisión, pero la justicia estadounidense ha ordenado a ambas partes comenzar a planificar la segunda fase del caso, la cual incluirá las propuestas del gobierno para restaurar la competencia, entre ellas la posible solicitud de división.